Bizi - Goxo

Sidra de Hielo

En el mundo vitivinícola se producen bebidas que por los elementos que intervienen en el proceso de producción (circunstancias climáticas, comportamiento de cierta variedad de uva, sistema de elaboración…) el producto acabado resulta diferente, original y comercialmente atractivo. Algunos ejemplos son los Sauternes, el Oporto o las Vendimias tardías de Alemania, entre otros.

En el mundo de la sidra también existen productos similares como la sidra de hielo, que tiene su origen en Canadá. Se trata de una sidra que se obtiene tras fermentar el zumo exprimido de las manzanas que se congelan en el árbol. Gracias a la concentración de azúcares, el producto resultante tiene un grado alcohólico mayor y suele ser dulce.

En Euskal Herria tenemos variedades de manzana autóctona que solamente se cultivan en esta tierra. Entre ellas, hay una que marca la diferencia por las características que presenta. Se llama Errezile o Errezil Sagarra. Es una manzana de de maduración tardía, ácida y rica en azúcares. Históricamente esta variedad se ha guardado sobre una cama de paja en las ganbaras (áticos) de nuestros caseríos. Tiene la capacidad de sobrevivir todo el invierno, perdiendo agua y arrugándose en un proceso natural de concentración y sin llegar a pudrirse. Es la variedad que empleamos en Zapiain para elaborar la sidra de hielo Bizi-Goxo.

En el proceso de elaboración de Bizi-Goxo interviene también otro factor important: Se trata del aire fresco que aporta el nuevo equipo humano de nuestra bodega, formada por Egoitz, Mikel y Ion. Es el relevo generacional que viene pidiendo paso.

Como el nombre indica, nuestra sidra de hielo es “Bizi” por su acidez y “Goxo” por el dulce que aporta la variedad Errezile. A pesar de ser considerada una sidra de postre, el equilibrio dulce-ácido hace de este producto una bebida polivalente, funcionando perfectamente como bebida de aperitivo.

Cata

Consumir en copa de digestivos, a temperatura no excesivamente fría (en torno a 7-8ºC) ya que al tener 10,5º de alcohol no es necesario que esté demasiado fría

Conclusión

Obtenemos el potencial aromático de la manzana consiguiendo llevar a la copa esos recuerdos de la manzana cocinada, bien en compota o asada.

Fase Visual:

Observamos un color de naranja escarchada con algunos destellos ámbar y manzana asada.


Fase Olfativa:

Es elegante, con recuerdos de manzana acaramelada, fruta escarchada, alguna nota de higo con recuerdos de compota y toques de uva pasa.


Fase Gustativa:

Sedosa, amplia con toques de golosina. Con un frescor eléctrico que aporta la acidez y reminiscencias cítricos. Tiene un final largo, amplio y cremoso.